Esos días en la loca BCN…

Llueve en Barcelona, no es el diluvio universal pero caen gotas algo fuertes; como en toda ciudad grande la lluvia no es excusa para no continuar con la vida cotidiana. Escondo la agenda dentro de la chaqueta, me subo la capucha y sigo caminando.En la esquina hay un gran camión, dentro de el se estira un señor mayor, su conductor supongo, parece esperar a que le den la orden de descarga, mientras, how much is Clomiphene to buy mata su aburrimiento tocando con GRAN escándalo una extraña corneta, tatatatatatatatata, una señora que caminaba con descuido da un brinco por el inesperado susto, el señor se rie y muestra una horrible dentadura, yo también me rio aunque un poco más disimulado… lo siento señora no pude evitarlo.

Sigo bajando por la Gran Via, veo Tinnanūr una multitud de paraguas, rojos, negros, grandes, pequeños, gruesos, delgados hasta en eso se ve la multiplicidad barcelonesa, en la esquina de Aribau una pareja se cubre mutuamente en un gran, gigantesco, paraguas azul, se besan apasionadamente generando su propia ola de calor, mientras tanto los demás nos morimos del frio y de las ganas, pienso “te compro tu novia, no voy a regatear el precio ni de pronto el valor”.

Yo camino hacia ella y ella hacia mi, yo llevo unos zapatos deportivos y ella va descalza, yo soy colombiano y ella rumana, ella me pide una moneda para comer y yo la esquivo pues el sentimiento de culpa habitual en estos casos no me da para tanto estos días de banco en blanco.

Paso por la Ronda Sant Antoni, desde lejos me la quedo mirando, me parece que es muy
temprano para que ya estén por su zona, ella me ofrece un beso y un poco de amor, no es fea tampoco es guapa, lastima que no me gusten las putas, hablamos
en otra vida linda.

Revolotean por mi mente los Fabulosos Cadillacs Siempre habrá vasos vacíos, con agua de la ciudad la nuestra es agua de río mezclada con mar, no importa el porqué, sólo sigo caminando; me canso de la lluvia, voy al paradero de bus. 5 minutos… 10 minutos… 15 minutos, nada que pasa el bus, en eso oigo una delicada voz femenina “me cago en la puta huelga de los buses no podré ir a casa a comer”, ni manera tocó hacer como Jhonnie Walker…. Keep Walking.

Offside
Vengas o no vengas siempre estás revoloteando en mi cabeza… si vienes pues mejor.

Se empieza como se termina, eso está claro

La vida es como los sueños decía Calderón de la Barca hace un montón de tiempo.Para mi cada año que empieza es eso, un nuevo sueño. Si, siempre he pensado que eso del fin de año es una excusa comercial más y que el año nuevo podría ser el 3 de febrero, el 7 de septiembre o o el 14 de noviembre y daría igual, el hecho es que cada año que empieza suelo hacer un reset, una desconexión de todo el año anterior y pretendo empezar de cero.

Me gusta ese pequeño reto que me propongo cada nuevos 12 meses, empezar a hacer cosas como si fuera la primera vez que las hago, encontrar la manera de darle la vuelta a mi vida sin que eso signifique un descontrol, ver el modo como puedo llevar a cabo todos esos planes que dan vueltas y vueltas y vueltas en esta acelerada mente hiperactiva.

Este año empezó bien, muy bien… cambios drásticos que eran necesarios, otros que no se esperaban pero que surgieron y pues ahí están; pero sobre todo muchas ganas de hacer cosas distintas, de experimentar con ciertas cosas que por X o por Y he ido aparcando y es que sin ninguna duda ha llegado la hora de coger al toro por los cuernos.

Es 2 de enero, quedan 363 días para soñar, pero sobre todo para poner los pies en la tierra, definitivamente los sueños sin alas no son nada pero los sueños sin tierra que pisar lo son menos.

Y tu lector del otro lado de la pantalla ¿que esperas de este año que comienza?

Offside
Y hasta banda sonora común tenemos….