Ciertas miradas son las que damos cada día, miradas sin intención o con ella, miradas que provocan, miradas casuales, miradas que entran por los ojos y salen por el pensamiento, miradas que nos encontramos o que buscamos.
Tratamos de evitarlo pero la vida se nos presenta como una sucesión constante de imágenes, fragmentos cotidianos de múltiples colores y sencillas historias.
Hace un tiempo solía ir cámara en mano retratando todo aquello que me encontraba, los últimos meses he perdido ese vicio, esa droga seductora de capturar la cotidianidad y el día a día en cuadros pixelados llenos de color.
Vuelvo y retomo, estoy dispuesto a capturar mis horas a través del lente, da igual si sale desenfocada o movida, la foto importa por su misma mirada, su cierta mirada. La foto no será a color, ni a blanco y negro se mostrará con el color potenciado que me provoque al momento de mirarla.
Trataré de dar una cierta mirada cada semana, trataré.