Três Lagoas Dicen por ahi…
Viernes de rumba. la discoteca se llama Seven, no, no la conocía, si, está bien chevere…
– Bailamos?- le pregunté a una de las amigas de un amigo.
– No hablo mucho español- me dijo con acento enredado.
Pero como para bailar eso no es que importe de a mucho: un dos tres, pasito pa’ lante y pasito pa’ atras…
Su hablar enredado y sus movimientos un tanto extraños en una ciudad de mujeres bailadoras de cumbia que vuelven locos a los hombres con su movimiento de caderas me indicaron que “esta cola no es de aqui”; en efecto terminó siendo una alemana de intercambio en la Uninorte.
– Yo vivo al lado, en Barcelona- le dije, buscando tema de conversa mientras bailabamos un merengue, el merengue que más mal he bailado en mi vida.
– ¿En Barcelona? espera, ella vive allá.- Me dijo mientras señalaba a otra de las integrantes del grupo.
Me la presentó y empecé a hablar con ella. Alicantina, residente en Barcelona hace muchos años, visitante asidua del CCCB, cuasi vecina mia, estudiante de la misma facultad y de la misma universidad…tantas casualidades y un baile…un baile que parecia barranquillera, pero barranquillera de las de vestido de cumbiambera desde los 4 años creo que bailaba el vallenato mejor que yo; ya dice nojoda, eche y cogela suave porque aja… no, no se lo creerian, “que fuerte tio que fuerte”.
Fue extraño hablar a 10 mil km de distancia con una persona que hace parte de la burbuja en la que vivo hace 3 años, fue extraño porque esta vez where to buy isotretinoin in hong kong YO jugaba de local, ella era la extranjera, YO podía preguntarle, interrogarla, mirarla extraño y sacarle sacarle sacarle información.
Si, le gusta Barranquilla y la costa en general, mentiras no me dijo que le gustara… me dijo que LE ENCANTABA que le gustaban mil cosas, que le fascinaba la gente, el calor (¿?¿?¿?), la comida, la música y el baile…
Yo medio asombrado le refutaba todo en busca de sinceridad y nada, no conseguia sacarla de su discurso, le gusta, le encanta Barranquilla y Colombia Y PUNTO.
– No, no me creo que te guste Barranquilla tanto como dices- le dije con un tono un poco negativo.
– Si, en serio me encanta– me dijo extrañada que yo dudara de su versión.
– Y dime, ¿porqué te gusta tanto Barranquilla?- le pregunté para cerrar el tema.
Me miró lento, muy lento, caviló las palabras y después me soltó sin ningún pudor ni asomo de duda.
– Pues porque Barranquilla es el mejor vividero del mundo.
No voy más al baile, definitivamente el pasto del vecino siempre está más florido.
Offside
ya empieza la cuenta regresiva..se que me va dar duro muy duro.