Decálogo con sabor a ron, cerveza y sol

Pensamientos alborotados con sabor a cuba libre, brisa y mucha música.

Después de casi 2 meses de vuelta por tierras LoCombianas y con embajada en Curramba, volví a Santa Marta, volví a toda regla pues el breve paso en carnavales no cuenta.

Volví a visitar a la familia, a conversar largo y tendido, a repasar historias con los amigos, a soportar el calor y a disfrutar de la brisa.

Dentro del espacio de relax del fin de semana aproveché para pensar, cosa que en los dos últimos meses no he podido, al menos en serio. En mi ritmo de vida actual casi siempre lo urgente no deja tiempo para lo importante y por eso venía postergando un espacio para centrarme, pensar, divagar y tomar nota de un decálogo necesario, un mapa virtual desde donde verme reflejado y guiado, una hoja de ruta en la que sentirme descrito y dibujado.

Este es mi decálogo (del todo actualizable)

1. No pienso luego existo, existo y por eso pienso.
2. El dinero no me mueve, es necesario y lo busco pero no es mi motor.
3. Las cosas sólo las hago por pasión, no hago nada porque “toca”, sólo “toca” morirse, lo demás solo lo hago si quiero, si me provoca y sobre todo si me da la gana.
4. La locura creativa es mi gasolina. Al menos una nueva idea al día.
5. No me creo ni mejor ni peor que nadie, simplemente diferente, no es lo mismo ni es igual.
6. Me importa más ser que parecer.
7. Los cambios siempre vienen bien, no me ato a nada, hoy estoy aquí, mañana quien sabe. Vivo en proceso de reinvención constante.
8. No planifico nada al 100%, todo al 70% el resto hay que dejarlo surgir.
9. Todo fluye, ideas, necesidades, futuro. Let it flow.
10. Creo en la química con las personas, creo en mis primeras impresiones, creo en ti, en mi, en nosotros, en vosotros y en ellos.

Mirar, observar y retratar es necesario, juro que se siente bien…

Desde mi balcón

[blip.tv http://blip.tv/play/ga9E8pcWAA]

Cuando me venía de BCN dije que así como allá había retratado la realidad, los espacios que recorría, los eventos a los que iba ahora que volvía a Colombia seguiría haciéndolo.

Pero no contaba con el poco tiempo que me dejan mis nuevas labores, aun así la mano me pica, la cámara me sonríe desde su estuche y me pide que grabe algo, que cuente cosas, que retrate mis nuevos espacios vitales, que les diga a ustedes al oído en donde estoy, que hago, como vivo.

En fin, que así como antes las abuelas miraban y chismoseaban a los vecinos desde su mecedor, este fin de semana empecé a mirar por el balcón de mi apartamento, pasó gente, carros, el sol… esto es lo que vi.

Créditos musicales: Sola/ Gabriel Barraza/ http://myspace.com/gaboozono